lunes, 10 de junio de 2013

Frankenweenie

El regreso de Tim Burton. ¿Por qué lo digo así? Muy sencillo: vemos como el viejo Tim regresa a el estilo tan personal que le dio su fama. La animación, la oscuridad, lo gótico, todo esos elementos tan Burton en uno de sus más viejos relatos. Frankenweenie es un "remake" de un cortometraje actuado que hizo Burton en sus inicios. Esta vez, la historia está armada completamente en animación (otro detalle muy Burton) y con una historia de casi dos horas que nos recuerda a los espectadores, quién es el Burton que tanto amábamos.


Me es difícil escribir de Tim Burton, pues me hace muy difícil el ser imparcial. Burton ha sido mi director favorito desde el momento mágico en que me senté en el cuarto viejo de mis papás y vi una y otra vez "El Extraño Mundo de Jack". Desde entonces, Burton y su estilo han marcado mucho mi ida y mi percepción estética como escritor, diseñador, aspirante a cineasta y actor amateur. Frankenweenie, por lo tanto, tiene un valor agregado para mí, el cuál es ciertamente emocional. Después de ver películas como "Alice in Wonderland" o "Dark Shadows", la ilusión se iba perdiendo en el horizonte y parecía que Burton estaba perdiendo su toque. La cinematografía seguía siendo casi la misma, pero había algo que simplemente ya no te maravillaba en sus historias, algo que ya no te dejaba con esa sensación indescriptible que te queda cuando terminad de ver "Edward scissorhands" o "The Corpse Bride". Cuando Frankenweenie llegó a los cines, simplemente tenía que verla. No sólo había visto el corto original hace ya muchos años, sino que era mi última esperanza de saber si el Burton que tanto me ha definido seguía existiendo. El resultado fue maravilloso.


Frankenweenie tiene la firma de su autor por todos lados y es una exquisitez visual para aquellos que nos gusta lo extraño, oscuro y hasta grotesco. Lejos de entorpecer la historia, la conversión del formato de cortometraje a largometraje contribuyó muchísimo a la creación de un producto totalmente nuevo que parte de la historia precursora, pero que no se limita a ella. Otro gran acierto fue elegir el formato de animación para contar la historia. Posiblemente esto es lo que le hacía falta a Burton y a los fans de sus historias, regresar al formato con el que todo comenzó hace ya mucho tiempo. La historia es una reinterpretación del la historia clásica de Mary Shelley y tiene unos toques tan dulces como oscuros. Burton, además, retoma temas recurrentes en sus producciones pasadas, las cuales son aún más notorias al inicio de su carrera: la presión social hacia lo que se considera "normal", el conflicto interno que se genera al contraponer lo que se quiere hacer y lo que una sociedad espera de uno y, lo más importante, la búsqueda de uno mismo y el forjar el futuro propio.


El diseño fotográfico es una maravilla. Algo entre las películas impresionistas viejas (Nosferatu, El Dr. Calligary, Metrópolis) y un ligero toque del terror torcido del cine de serie B. Tan vívida es la imagen y la historia en la pantalla, que el blanco y negro (el cuál parece estar de moda) no es impedimento para disfrutar la historia; es más, en momentos hasta se olvida esta característica. Las imágenes limpias en composición, pero cargadas y personajes bastante retorcidos son ya un clásico de Burton, y en Frankenweenie regresan en todo su esplendor.


Los personajes de este film están rebosantes de vida y todos y cada uno (si bien complejos o de poca dimensión) sobresale a su manera, para contrastar un mundo que se cree "normal", pero que está lleno de personas con irreverente individualidad. Es impresionante la manera en que podemos tener un relato con una premisa tan sombría y aún así tener criaturas que te inspiren alegría y fantasía tan vívidas. Sparky, por ejemplo, es un ser adorable y su relación con Persefone (la perrita de arriba) es tan maravillosa, pero tan simple, que no hacen falta que los personajes hablen para poder generar una profunda empatía con ellos.



Y ya que tocamos el tema de los personajes, se agradece profundamente que la elección de elenco no incluyera nombres que, al parecer, ya vienen por añadidura al apellido Burton. No tengo nada en contra del trabajo actoral de Johnny Depp o de Helena B. Carter... Muy por el contrario, son de mis actores preferidos; sin embargo, la ausencia de ellos le dio mucha frescura a la historia que, en últimas instancias, parecía recaer ya solamente en su presencia. Además, fue algo muy atractivo recordar las voces e interpretaciones de nombres como Catherine O'Hara o Wynona Ryder, quienes acompañaron a Burton y dieron vida y voz a los personajes más queridos al inicio de su carrera.


Si tienes la oportunidad de verla, hazlo. Si tienes duda de si la vas a disfrutar, lo harás y bastante. Si no sabes si es para todo público, lo es (bajo la premisa que es Burton puro y lo que ello conlleva). Frankenweenie es ideal para olvidar películas extrañas (pues técnicamente no fueron fracasos) como "Alice in Wonderland" y volverse a enamorar de un cineasta al cuál es imposible perderle la pista.



También quiero mencionar un poco respecto a la música y al trabajo de Danny Elfman. En este caso, el score es mucho menos ostentoso a sountracks tan grandilocuentes como el de "Alice in Wonderland", pero no por ello menos impresionante. Realmente, el trabajo de Elfman (que es una maravilla por sí solo y de lado de Burton es una sinergía excelente) hace resaltar mucho la historia en Frankenweenie y  es el estilo justo para la estética del film. Es un score no tan armónico y orgánico como el de Alice, sino que es más directo: con muchos acentos, crea tensión del momento y se mezcla más fácilmente con el fondo.

Haber visto esta película el día de hoy me puso de buenas y es una buena forma de saber que mi día va a ser excelente y tan bueno como unas ricas palomitas jumbo.

Ficha Técnica

Frankenweenie (2012)
Dir. Tim Burton
Creadores: Tim Burton (idea original), Leonard Ripps (guión de 1984) y John August.
Disney Pictures

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